Gran Canaria, enero 2023.
El evento, inaugurado el pasado 2 de diciembre, ha rendido homenaje a los artistas canarios, a la juventud y a la paz, un valor especialmente significativo en el actual contexto marcado por el conflicto entre Rusia y Ucrania, países representados en esta edición por dos de los escultores participantes.
Con diez artistas invitados y diez escenarios navideños, celebramos también la recuperación de las cifras de asistentes pre pandemia con 151.207 visitantes. La recaudación, también en alza, vuelve a tener un carácter solidario entregando un total de 18.077 euros a cuatro comedores sociales y a la Asociación de Rescate Juvenil.
El recorrido navideño nos invitó a sumergirnos en un universo de tradición, arte y simbolismo. Desde la escena inicial del ucraniano Oleksyi Poda, inspirada en Giotto y Alfred Sisley, que retrata al cuidador de animales y cultivos con un realismo conmovedor, hasta las delicadas lavanderas del neerlandés Johannes Christoffel Hogenbrink, inspiradas en el tinerfeño Pedro de Guezala, cada obra aporta una mirada única del espíritu navideño. La fuente central, elaborada por Paco Arana y Bentejuí Ojeda, simboliza la vida y el fluir de las emociones. El conjunto se amplía con las esculturas del canadiense Guy-Olivier Deveau y el ruso Aleksey Shchitov, que evocan el esfuerzo humano y el compromiso con la paz, además de un guiño al legado de Néstor Martín-Fernández de la Torre. Entre las escenas más admiradas destacan los Reyes Magos descansando, del estadounidense Gresham Glover, la alegría popular de la canadiense Karen Fralich, inspirada en Félix Reyes, y la representación de la vida cotidiana con la vendedora de productos festivos, homenaje a la sabiduría de las generaciones mayores.
El trayecto culmina con tres obras de gran simbolismo: la Estrella Anunciadora y el Ángel de las Dunas, del irlandés Fergus Mulvany, y el Nacimiento de la estadounidense Sue McGrew, inspirado en Rafael. Junto a ellas, una segunda fuente, también de Arana y Ojeda, irradia serenidad con flores modeladas una a una en arena. Sin duda, uno de los momentos más emotivos de esta edición tuvo lugar frente al Ángel de las Dunas, cuando el artista Pepe Dámaso visitó el Belén y posó ante la escultura, sellando con su presencia el encuentro entre el arte efímero y el alma eterna de la cultura canaria.
Según expresaron los directores del Belén, Miguel y Aday Rodríguez, el equipo centra ahora su mirada en la próxima edición, que marcará la mayoría de edad del evento. Una cita especial que desde ahora se perfila llena de sorpresas y desafíos creativos.