Gran Canaria, enero de 2009.
El Belén de Arena de Las Canteras ha convertido una vez más la playa, en un espacio de arte efímero, solidaridad y emoción colectiva. Considerado el belén de arena más grande de España: ocupa una superficie de 600 metros cuadrados y ha requerido de 270 toneladas de arena para su construcción.
Concluida su tercera edición, esta exposición al aire libre ha recibido más de 130.000 visitantes entre el 5 de diciembre de 2008 y el 9 de enero de 2009, consolidándose como uno de los eventos más esperados de la Navidad en Gran Canaria.
El proyecto, liderado por los canarios Miguel y Aday Rodriguez y bajo la dirección artística de Etual Ojeda ha logrado en apenas tres años construir una identidad propia que trasciende fronteras: un belén monumental hecho solo de arena y agua, moldeado por artistas de distintas partes del mundo y admirado por miles de personas que cada año pasean por la orilla para descubrir sus nuevas historias.
En esta tercera edición participaron ocho escultores procedentes de seis países: España, Canadá, Dinamarca, Irlanda, Rusia y Ucrania. Entre ellos, nombres ya habituales como Etual Ojeda, Alexey Dyakov, Karen Fralich y Fergus Mulvany quienes junto a nuevos talentos internacionales dieron vida a un conjunto de ocho esculturas que alcanzaron hasta cinco metros de altura.
La edición 2008-2009 ha marcado un avance técnico sin precedentes gracias a la introducción de una innovadora técnica de compactación de la arena. Este método, desarrollado por el equipo técnico del Belén, ha permitido la creación de bloques cúbicos de gran estabilidad, capaces de sostener estructuras verticales y ángulos rectos que antes eran imposibles de lograr con arena natural.
La propuesta de este año abarca todo un recorrido desde la Anunciación hasta el Nacimiento en el pesebre y la ofrenda de los Reyes Magos, narrada a través de diferentes estilos como el Realismo, el Cubismo y el Renacimiento.
Además de su valor artístico, el Belén de Arena mantiene su vocación solidaria, parte fundamental de su esencia desde su creación. Este año, lo recaudado a través de las donaciones de los visitantes se destinó a una campaña conjunta con Cruz Roja, reafirmando el compromiso social del evento con los más necesitados.
Mientras la maquinaria devuelve toda la arena a la playa, el Belén deja tras de sí la promesa de volvernos a sorprender. Desde Las Canteras, esta iniciativa sigue creciendo, con la mirada puesta en el futuro y el compromiso de seguir uniendo arte y comunidad.